Esta serie de corte policial, fue lanzada a la televisión de la mano de la cadena CBS de Estados Unidos, en setiembre de 2008, y hemos podido disfrutarla por estas latitudes a través del canal Warner.
Creada por Bruno Heller, el elenco está encabezado por el actor australiano Simon Baker -el escritor que intenta seducir a Anne Hathaway en "El diablo viste a la moda- y por un elenco estable de actores que básicamente se han promocionado a través de esta serie.
Patrick Jane (Simon Baker) es un famoso y mediático "lector de la mente"; en un programa televisivo se burla públicamente de un asesino buscado por la ley apodado "Red John" y éste último toma revancha asesinando a la familia de Jane.
Tras ser internado por cierto período en un hospital psiquiátrico -a causa del trauma sufrido por esa terrible tragedia- regresa a la vida normal, dejando atrás sus épocas de falso vidente.
Gracias a sus conocidas habilidades como observador y sus atípicas pero efectivas dotes deductivas, es contratado por el California Bureau of Investigation como asesor en casos de asesinato, lo que facilitará su objetivo real de seguir de cerca la pista de "Red John", quien todavía no ha sido capturado.
Bajo la supervisión de la Teniente Lisbon (Robin Tunney) y acompañado por un grupo de investigadores, resolverán distintos casos que directa o indirectamente lo acercan a la pista del famoso asesino.
Esta serie, cuya primer temporada fue un gran éxito a nivel mundial, ya va por su tercer año de emisión en el aire y han confirmado la realización de una cuarta temporada.
A pesar de haber sufrido ciertos altibajos - sobre todo en su segunda temporada, algo común en casi todas las series de "larga duración" - ha logrado corregir y mejorar algunos detalles que la han consolidado como una de las series más vistas y entretenidas de la pantalla chica.
Si bien los casos que presenta cada capítulo, tienen una resolución más bien simplista -bordeando lo elemental- el atractivo de esta serie se centra básicamente en el ingenio, poder de percepción y manipulación de la que hace gala el personaje principal a la hora de aportar sus "habilidades" en pos de la caza del asesino de turno.
Esta serie, luego de mucho "ensayo y error", ha encontrado en el humor y el desarrollo de sus personajes la clave del éxito, ingredientes que la han salvado de terminar zozobrando como muchos programas televisivos que comienzan prometiendo mucho, pero se quedan en la intención.
Quienes la han seguido de cerca, coincidirán conmigo en que la tercera temporada se corona como la más atractiva de todas; es en ella donde podemos disfrutar al máximo de la picardía de Patrick Jane y en la que han sacado buen partido del resto de sus personajes, dándoles mayor protagonismo y dibujando un perfil más interesante y definido de cada uno de ellos.
El prometedor desenlace en relación a la historia central que involucra al misterioso "Red John" y la incorporación de nuevos y enigmáticos personajes, es otro de los puntos altos que convierten a esta última temporada emitida, en un programa que invita a no perderse ninguno de sus capítulos.
